viernes, 17 de octubre de 2008

te quiero mami pero ya no soy un niño al que puedas proteger

No podía irme sin reconstruirte
y adherir gentilmente cada pedacito
casi como por instinto
de lo que alguna vez existió o eso creo
Recogí cada pétalo y el polen desperdigado
en las burbujas del aliento de los hombres
En cada átomo estaba ese brillo
disimulando su silueta amarilla
bajo el gris estridente de los ruidos
Protegí mis oídos con los escudos
y en el eco
ése eco de mar en la concavidad de tus manos
Desperté de la interferencia
mi cuerpo aún adormecido sentía
circular sus glóbulos reactivados hacia la atmósfera
En la ceremonia de las voces
un niño nació transparente
ingrávido
un niño nació albergando lágrimas que ardían en el pecho
y refluían hacia el universo donde nacen
Cerraste los ojos tendido en la periferia
entre el espacio y los volcanes
laxa eterna entera
alargabas el torso hacia algún polo
y ningún polo te contuvo
solo las sienes
y cientos de auxilios sobre el cuerpo
un poco libres ó libres realmente
viajaron hacia mi casa las calles
golpearon mis cabellos enredados
que hablaron en su idioma un poco libres
ó libres realmente negros y enredados
lloraron de tanto orden tan prolijo
y almidonado de las calles pero
mi nombre no es ciudad ni mujer
mi nombre no es ciudad ni mujer ni hombre
mi nombre no es calle ni sol ni pétalo
mi nombre no es dios ni ángel ni espalda
mi nombre no es no
mi nombre no es lali no

jueves, 16 de octubre de 2008

domingo, 12 de octubre de 2008

digo que no

recuerdo cuando extrañaba a la palabra
y ella se reía mucho ante el espejo
casi de espaldas susurraba con miedo
al entrar por mi boca sucia
mi sonrisa turbia intentó imitar a las hojas
esas que huelen a fresco
y te arrancan nostalgias por la ventana
o cuando sales por la puerta y te duelen los grises
y todo el humo que densifica las brisas
me tomaste de la mano
y cantamos juntos camino al poema
tu nunca lo supiste
aunque siempre te preguntaste que sería de mí
en qué lugar estaría para desvanecer
y atrapar burbujas de pureza
en las copas de los árboles
no tengo miedo
no tengo miedo repito
solo estoy atenta y cierro las ventanas cuando es de noche
no miro el mar porque duele en el pecho
y retumba la espuma con rabia
no tengo miedo
digo no tengo miedo
y recupero el aliento porque estoy perdida y lo sé
debo quedarme quieta en este lugar
pasar desapercibida hasta encontrar algo
aún no sé qué
voy a salir a buscarlo quizá
porque me pesan los días
el plomo ya está destiñendo mi casa
hay moho en los rincones y huele a rancio
a vida cansada
rozo mis pies contra el suelo
huelen a mi las perillas y las puertas
huelen a mí más que yo
y eligen nombres que no entiendo
y me nombran y me nombran
¿Hoy vendrás a buscarme antes de dormir?